En el mercado existen diversos tipos de cerraduras que se adaptan perfectamente a las necesidades que presentan los usuarios, cada cerradura cumple una función específica, por lo que deberá elegir la indicada por el tipo de puerta donde será instalada.
Existen diferentes tipos de cerraduras para puertas de madera, corredizas y metálicas que son seguras, pero cada una cumple una función específica.
Cerraduras para puertas de madera
Cerradura de embutir: Un tipo de cerraduras muy empleadas para los accesos exteriores del hogar, el mecanismo de cerrojo esta resguardado en el interior de la puerta y es mas seguro frente a posibles ataques vandálicos.
Los ladrones no pueden acceder al núcleo de la cerradura de manera fácil, impidiendo su entrada, para que la cerradura sea 100% eficiente es necesario revisar los componentes porque depende de las características particulares.
Cerrojos: Este tipo de cerradura empleada en las puertas de madera principales del hogar, presenta un perno largo y grueso, que se inserta en el marco de la puerta para evitar la apertura no deseada.
Este mecanismo se encuentra resguardado dentro de la puerta, presentan gran resistencia frente ataques externos y no puede abrirse con herramientas de manera manual.
Perillas: Este sistema de cerrojo es común en el mercado y suelen se los mas vulnerables en cuestiones de seguridad, en cuanto al diseño son similares a las cerraduras de manijas con palanca y se emplean con frecuencia, en puertas de interiores.
Con el simple objetivo de brandar a los usuarios privacidad, pero su grado de seguridad no es infalible.
Cerraduras para puertas corredizas
Cerradura de perno lateral: Este tipo de cerradura posee un pestillo curvado que se engrana en el marco lateral de la puerta. De este modo, impide la apertura y se puede instalar en cualquier altura de la puerta.
Cerradura de barra de bloqueo: Esta clase de cerradura es utilizada para puertas corredizas que se emplean en el acceso exterior de la vivienda, pueden ser un método de refuerzo de acceso desde el jardín, pero suelen ser bastante seguras.
Cerradura de palanquetas: Esta clase de cerradura se instala en el canal superior de las puertas correderas para evitar que esta será descarrilada, permite reforzar la seguridad que brinda la cerradura principal, ya que cumple la función de un complemento.
Cerraduras para puertas metálicas
Cerradura de perilla: Esta cerradura es muy común y es empleada para puertas de interior por su nivel de vulnerabilidad.
Cerradura con cerrojo: Funcionan de forma segura debido a que su perno es grueso y fuete, son instaladas en los accesos al exterior de la propiedad.
Cerradura de embutir: Cuentan con un mecanismo que está instalado en el interior, por lo que son seguras y difíciles de vulnerar.
Todos los modelos de cerraduras tienen sus beneficios, una correcta instalación permitirá el buen desempeño y protección de las diferentes cerraduras según la puerta donde este instalada. Las puertas son otro dispositivo de seguridad que debe estar al 100% para evitar que sea forzada o dañada por los malhechores.
